Verushka Alvizuri, La “niña salvaje” de Paraguay

Publié le 4 décembre 2024 Mis à jour le 4 décembre 2024
le 25 octobre 2024
couverture la nina
couverture la nina

Prohistoria ediciones, 2024

La historia de Maryvonne, la “tierna cobaya” de este experimento, comenzó en 1932, cuando el etnógrafo francés Jehan Vellard emprendió una misión en Paraguay con el propósito de colectar objetos para el Musée d’Ethnographie du Trocadéro. Además de informaciones, objetos y esqueletos humanos, su “botín” comprendía dos niños categorizados como “indios guayakí”: mientras que el varón fue dejado a cargo de la familia que hospedó a Vellard en su hacienda (y falleció poco después), la niña fue sacada de Paraguay, con el ambiguo propósito de ser observada por el etnógrafo y, al mismo tiempo, criada por Amélie Vellard, su madre.
Los tres vivieron en Brasil, Argentina, Bolivia y Perú, donde se instalaron entre 1947 a 1962. Así, la historia de una “niña salvaje” que se volvió “civilizada” dio la vuelta al mundo.Nadie hasta ahora se ha preguntado cómo fue que Maryvonne acabó siendo parte de un botín etnográfico, ni por los muchos desconsuelos que rodean a este episodio. Nadie tampoco cuestionó la transformación de Maryvonne en un objeto de ciencia.
A través del hilo de esta historia y de su comparación con otros casos que tienen con él similitudes y diferencias, se plantea la historicidad de la condición indígena así como la historia misma de la etnografía francesa.
Verushka Alvizuri nos introduce en un viaje fascinante que sacude los cimientos de lo que damos por sentado, conduciéndonos desde los aspectos racistas de la construcción del conocimiento científico forjado al calor de los imperios coloniales hasta la posibilidad de ponderar, analizar y escribir el impacto de esa agencia científica en la biografía de Maryvonne, la mujer observada.